por Gabriel Neuman |
Última Actualización: diciembre 19, 2011 Los productos de limpieza que utilizamos para limpiar nuestros mostradores, lavar los platos y la ropa y que perfuman el aire, contienen substancias químicas potencialmente tóxicas para nuestros cuerpos.
Los hallazgos del informe son sorprendentes y preocupantes por varias razones:
Una empresa, Sunshine Makers, fabricante de “Simple Green”, se habían comprometido a eliminar los ftalatos en su producto.
Resulta que tenemos un producto que todavía contiene ftalatos. Uno de los productos, “Tide” libre y suave, es comercializado y utilizado por las madres de niños pequeños para la piel sensible.
Este contenía 1,4-dioxano, que la EPA considera un “posible cancerígeno humano”.
Lo que es peor, es que los consumidores no tienen manera de saber qué productos químicos están contenidos en estos productos de limpieza debido a las leyes de etiquetado laxo.
Cada año aparece más y más evidencia, encontrando que están apareciendo en nuestros cuerpos asma, daños reproductivos y cáncer de mama. Incluso los recién nacidos nacen con más de 200 productos químicos industriales en sus sistemas.
La dosis de productos químicos procedentes de un spray simple puede ser mínimo, pero la exposición a químicos pueden acumularse con el tiempo logrando efectos en la salud a largo plazo, especialmente en mujeres y los niños.
Las mezclas de productos químicos a que estamos expuestos también plantean un problema.
Algunas compañías de productos de limpieza se han esforzado por realizar prácticas verdes, comprometiéndose a quitar las substancias químicas especialmente dañinas, sobre todo los ftalatos y almizcles sintéticos.
Sin embargo si las pruebas revelan que estas substancias químicas todavía se encuentran presentes en estos productos, incluso después de declarar lo contrario, los consumidores empiezan a perder la fe en la capacidad de una empresa para los mejores intereses del consumidor.